Entre el Amor y la Guerra – Capítulo 4

Capítulo 4: «Decisiones»

Fanfic: Entre el Amor y la Guerra


Katrina se había mudado a casa de 17 y a partir de ese momento se dedicó a su tienda de armas y a su marido. Un día en la mañana.

Katrina: Oye, amor, el desayuno está servido, te tengo una sorpresa.

#17: ¿Sorpresa? ¿De qué estás hablando?

El androide bajó al comedor con una sonrisa en el rostro producto de sus pensamientos.

#17 (pensando): Vaya, esto me salió mejor de lo que esperaba. ¡Hasta me cocina!; bueno, creo que imitar ciertas costumbres humanas no me hará daño.

De pronto algo le vino a la mente a 17 y esto hizo que su sonrisa desapareciera.

#17 (pensando): Ese maldito enano debe estar aprovechándose de mi hermana, y ella de imbécil que lo permite, pero ya verá; ese idiota me las pagará. 18 tendrá que aprender que las cosas se hacen a conveniencia de uno, no de los demás.

En ese momento, 17 llegó a la mesa, que estaba adornada con flores, tenía unas velas pues la luz estaba apagada; en fin, estaba decorada para una cena romántica. #17, sin proferir palabra, echó todo al suelo, pues le parecía ridículo comer en algo que parecía un carnaval; luego se echar todo al suelo siguió con su comida.

#17: No está mal la comida, nada mal.

Katrina bajó las escaleras muy emocionada esperando un abrazo, un beso, o algo así por la sorpresa que le había preparado a su marido, ella sabía que era un desayuno, pero el detalle era lo que importaba. Menuda sorpresa se llevó al llegar al comedor y ver todo en el suelo y a 17 comiendo como si nada.

Katrina (pensando): Pero, ¿qué pasó aquí?

#17: Oye, será mejor que arregles este desorden, y un consejo: antes de servir la comida quita el carnaval de la mesa, es muy incómodo comer con todo eso encima.

Katrina no podía creer lo que escuchaba, ¿Cómo podía decirle eso de esa forma tan fría?

#17: Ahh, por cierto; ¿cuál era esa sorpresa que me tenías?

Katrina: No… nada… olvídalo.

#17: Como quieras, pero no te entiendo, hace un momento te veías muy emocionada por la sorpresa y ahora ni le das importancia.

Katrina no sabía qué pensar; no sabía si era cinismo o inocencia, realmente quería que fuera lo segundo. No era la primera vez que pasaba algo así entre ellos; el nunca gritaba ni la insultaba, pero siempre le hacía desplantes como el de la mesa; además sólo le demostraba cariño cuando hacían el amor, el resto del tiempo evitaba su presencia o la ignoraba por completo y ella ya se estaba hartando de esa situación.

#17: ¿Qué esperas? Es incómodo caminar entre tanta basura.

Katrina: Ya lo arreglo.

Mientras Katrina arreglaba el desorden, 17 se fue a su trabajo. Luego de este hecho pasó un mes y en casa de Krilin celebraban el 5º cumpleaños de Marrón.

Krilin: Ven con papá, cariño.

Marrón sonrió y fue corriendo donde Krilin.

Marrón: Papi, papi, papi.

Krilin: Ajá, hoy cumples 5 añitos.

Marrón: SÍIIIIIIII.

#18: Deja las payasadas, Krilin, la vas a malcriar.

Krilin: Vamos, un poco de cariño no le hará daño.

#18: Lo sé; pero MUCHOS pocos de cariño juntos sí la van a malcriar.

Krilin: Además es su cumpleaños.

#18: Bien, pero sólo porque es su cumpleaños.

#18 sonrió y tomó a Marrón en sus brazos.

#18: Hmmmmm, la hubiera preferido con tu cabello y mi cara; así como está va a terminar soltera.

Krilin: ¿Qué insinúas?

#18: Nada, sólo que tu cara no le queda bien a nuestra hija, sólo eso.

Los esposos siguieron discutiendo sobre los atributos de Marrón y luego se dedicaron a la preparación de la fiesta.

Krilin: Bueno, creo que sólo faltan algunas compras.

#18: ¿Algunas compras? Te dije que hicieras todo ayer.

Krilin: Bueno, deje una que otra cosa para hoy.

#18: Mira, en este mismo momento vas a traer lo que falta, ¡¡Y ES YA!!

Krilin: Ya voy, no te enojes.

#18: ¿Qué voy a hacer contigo?

Cuando Krilin se fue, 18 se quedó con Marrón.

Marrón: Mami, mami.

#18: Acá estoy; espero que no seas tan tarada como tu padre, ya tienes suficiente con tener su rostro como para que heredes su inteligencia… pero sí quiero que tengas sus sentimientos.

18 recordó los momentos durante la pelea con Cell cuando Krilin rompió el control; recordó todo lo que pasó en el Templo de Kamisama luego del fin de Cell y una sonrisa se dibujó en su rostro.

#18: Aunque es un grandísimo idiota, es el hombre más noble que conozco y es por eso que lo amo.

Luego volteó a ver a Marrón.

#18: Oye, hijita, no le digas nada a tu papá de lo que acabas de escuchar, sería embarazoso, este será nuestro pequeño secreto.

Marrón le contestó con una sonrisa y la androide siguió los preparativos de la fiesta. En casa de 17, él y Katrina estaban almorzando.

Katrina: Oye, ¿por qué tu hermana nunca nos visita?

La pregunta tomó por sorpresa a 17, ¿por qué preguntaba eso? ¿Qué le iba a decir? 17 se quedó un rato en silencio y luego respondió.

#17: La última vez que vino tuvimos una discusión muy fuerte, por eso.

Katrina: Entiendo, pero son hermanos, no deberían distanciarse de ese modo.

#17 no contestó y siguió comiendo. Katrina recordó la pelea que había visto, esa vez fue la única ocasión en que ella vio realmente enfadado a 17, pues con ella nunca se había portado así. #17 se levantó de la mesa y se preparaba para irse.

Katrina: ¿Ya te vas?

#17: Sí.

Katrina: Ya no paras en casa.

#17: Tengo muchas cosas que hacer.

Katrina: Al menos méteme en tu lista, ¿no?

#17: ¿Eh?

Katrina: Que me gustaría que me dedicaras más tiempo, sólo vienes a comer y en la noche, nada más.

#17 (pensando): Creo que estoy siendo muy obvio, ella no es tonta y si sigo con esta actitud me va a descubrir mis intenciones.

#17: Lo siento, de ahora en adelante te dedicaré más tiempo.

Al decir esto, 17 se acercó a Katrina y le dio un beso al cual ella respondió. Luego, el androide se fue.

#17 (pensando): Nada me cuesta fingir, pues el premio es muy bueno; el sacrificio vale la pena. Todo por conveniencia, ojalá mi hermana aprendiera esa valiosa lección.

Katrina: Espero que cumpla su palabra, realmente me hace mucha falta su cariño, creo que a pesar de todo, lo amo más que antes.

Mientras tanto, en casa de Krilin, los esposos ultimaban detalles para la noche y de pronto 18 se quedó pensativa.

Krilin: Mi vida por tus pensamientos.

#18: Créeme que no valen tanto.

Krilin: Pero igual me gustaría conocerlos.

#18: Estaba pensando en 17, me gustaría que viniera, pero no con la actitud de la última vez.

Krilin: Bueno, habla con él entonces, ha pasado un año desde aquella vez, las personas cambian.

#18: Tienes razón, ya mismo voy a hablar con él.

Krilin: Bien, yo seguiré los preparativos.

#18: Regreso pronto.

No se pierda el próximo capítulo.