¿Universos Paralelos? – Capítulo 5

Capítulo 5: «Gokú y Gohan contra el rey Vegeta II»

Fanfic: ¿Universos Paralelos?


Cápsule Corp.

La última vez que nos ocupamos de lo que pasaba en la Tierra, vimos que Vegeta II fue llevado a la C.C, y creyéndose víctima de un complot, atacó a Trunks y a Bulma. Entonces Gokú y Gohan acudieron a ayudar y Vegeta II confundió al primero con Bardock.

Vegeta II: Bardock, ¿cómo pudiste traicionarme? ¿Eres de la O.SA.PA, no?

Gokú: ¿Qué dices? No entiendo, yo…

Vegeta II: Pero no sé , estás distinto. Eras un hombre maduro y ahora pareces un muchacho… (Su cara toma una expresión feroz) De todas formas ¡¡MUERE!! (Le lanza un rayo que Gokú apenas alcanza a esquivar) ¡¡¡¡AAAAAAAGGGGGGGHH!!!! (Vegeta II se transforma en SSJ) ¡Ahora sí me las pagarán, insectos!

Gohan: ¡Ten cuidado, papá!

Gokú: ¡¡¡¡AAAAAGGGGGGHH!!!! (Se transforma también y se prepara) ¡Vegeta, tranquilízate, estás entre amigos!

Vegeta II: ¡Cómo te atreves a hablarme de ese modo, insolente!, ¿Olvidas que soy tu rey? Yo te enseñé a ti y a todos los demás a convertirse en SSJ y ahora osan traicionarme. ¡Morirán por esto! (Vegeta II cierra los puños y se coloca en posición de combate. Luego concentra su ki y el resultado asombra a los presentes por su intensidad)

Gohan: ¡Oh, su ki es muy poderoso!

Bulma: Ya sabía que se iba a volver loco con ese tema del SSJ y de superar a Gokú, ¡Ahora dice que él les enseñó a todos! ¡Dios nos ampare!

Gokú: ¡Vegeta, vámonos de aquí a luchar a un lugar donde no haya gente!

Vegeta II: ¿Desde cuándo te importa eso, Bardock, o quien quiera que seas? Tú debes ser uno de esos roñosos pacifistas, estas palabras tuyas lo demuestran. Me das asco, traidor, cobarde, te ultimaré en un santiamén y luego será el turno de este muchacho. (Señala a Gohan) ¡Pelea, maldito!

Vegeta II ataca a Gokú con una serie de trompadas y patadas que le resultan muy difíciles de parar. Entonces Vegeta II aprovecha una fracción de segundo en la que Gokú se distrae para meterle una certera patada en la boca del estómago que lo hace pasar a través de la pared.

Gohan: ¡¡¡Papá!!!

Vegeta II: ¿Así que ése es tu padre, no? Espera que termine con él y luego será tu turno.


En el palacio de Dende.

Dende: Mr Popo, acabo de recibir una horrible noticia que me informó por vía telepática Kaiosama: Los dioses Talos y Secur, quienes fueron encerrados en una dimensión alternativa hace mil años, por los Kaios, consiguieron escapar.

Mr Popo: ¡Oh, no! ¿Cómo lo lograron?

Dende: Aprovecharon una rarísima conjunción de planetas para incrementar sus poderes y romper las paredes de su prisión.

Mr Popo: Es terrible, Mr Popo escuchó hablar de ellos al anterior Kamisama.

Dende: Y eso no es todo, por alguna razón trasladaron a Vegeta a un universo paralelo, donde el planeta de los saiyanes no fue destruido y donde es el rey, y al otro lo mandaron a la Tierra, a Capsule Corp.

Mr Popo: Mr Popo sabe que ese Vegeta siempre trae broblemas.

Dende: Un momento: percibo dos grandes ki (se concentra para investigar lo que pasa en la Tierra) ¡Oh, el otro Vegeta y Gokú están peleando! ¡Me comunicaré con Pikoro para que le avise a Gokú y a los demás, de otro modo las consecuencias serán impredecibles…! Pikoro… Pikoro…
En un rincón de nuestro planeta…

Pikoro: ¡Eh!, Dende, ¿qué sucede?… ¿Cómo?… Voy enseguida (Sale volando a toda velocidad) Siento por aquí dos grandes kis, uno de ellos se parece al de Vegeta, pero es mucho más maligno (nunca pensé que diría esto) ¡Al fin llegué! ¡¡Gokú!!


Capsule Corp.

Gokú: Vegeta, no sé lo que te pasa, así como no imagino cómo hiciste para que te creciera la cola, pero te detendré cueste lo que cueste. Eres demasiado poderoso para dejarte en este estado.

Vegeta II: Cállate, vasallo irrespetuoso, ¿a tu rey le hablas así?

Gohan (asombrado): Está totalmente loco, sin duda.

Gokú y Vegeta II se trenzan nuevamente y la lucha es muy pareja, aunque se inclina un poco a favor de Gokú. En es momento es cuando llega Pikoro.

Pikoro: ¡Deténganse! ¡Hay algo muy importante que tienen que saber!

Gokú: ¡Pikoro!

Vegeta II (Con una sonrisa maligna): ¿Tú también quieres morir, namek?

Pikoro: ¡Escúchenme, tengo algo muy importante que contarles! Si les parece seguirán peleando después! ¡Ha sucedido algo anormal! (Dirigiéndose a Vegeta II) Su Majestad, ¡esto os afecta especialmente!

Al oírse llamar Majestad astutamente por Pikoro, Vegeta II se aplaca un poco y dice:

Vegeta II: Veo que eres un súbdito respetuoso, por eso te concederé el honor de informarme sobre eso que dices que es tan importante, pero te advierto: si llega a ser una tontería o una trampa, morirás.

Pikoro (pensando): Funcionó.

Gokú: ¿Qué sucede, Pikoro?

Pikoro se acerca y les cuenta todo desde el principio. También se enteran Bulma y Trunks.


En el palacio real del planeta Vegeta.

Rya camina rápidamente por un pasillo y se topa con Nappa, quien va en la dirección opuesta.

Rya: ¡NAPPA! ¡Oh!

Nappa: Perdóneme, Su Alteza.

Rya: ¡Eres un torpe!

Nappa: Quisiera hablar con Su Alteza, si me lo permite.

Rya: ¿Qué quieres ahora? Dímelo rápido, porque tengo que hacer.

Nappa (Toma a la princesa fuertemente por los cabellos, acerca su cara a la de ella y le dice, solemnemente): Según los antiguos ritos saiyanes vengo a retarte a un combate para que cuando yo te venza te haga mi mujer.

Rya todavía no se soltó de la presa que el saiyan hizo en sus cabellos. Lo mira a los ojos, divertida y un poco excitada por la situación, de repente su rostro toma una expresión feroz, se suelta y golpea con su puño a Nappa en la boca del estómago, lanzándolo contra la pared. Luego se acerca a él, lo toma del mentón y lo besa salvajemente en la boca, después le dice con una sonrisa despreciativa:

Rya: Acepto, claro, pero perderás. Eres muy ambicioso, de ser un simple guerrero, guardaespaldas de mi hermano, ahora quieres pertenecer a la familia real. No lo lograrás y deberías darte cuenta de eso, soy una guerrera de clase alta y tú no me llegas ni a los talones. Raditz me hizo la misma propuesta y le hice morder el polvo y a ti te pasará lo mismo. (Cruel) No te preocupes, Nappa, si estoy de buen humor tal vez te dé un premio de consuelo, a pesar de que eres un poco viejo para mí. ¿Eso te gustaría, no? Naturalmente que no debes soñar con que serás mi marido, se trata de dos cosas distintas ¿no te parece? (Pellizca sus mejillas mientras ríe)

Nappa: Quiero que combatamos ahora mismo porque estoy ansioso de que seáis mía para haceros tragar esas palabras. Recordad, esta noche será el comienzo de nuestra luna de miel. Ya me vendréis a suplicar, entonces. Allí os recordaré este momento y estoy seguro de que me besaréis y me pediréis perdón. (Nota la mirada entre sorprendida e indignada de Rya y agrega con una sonrisa sarcástica) ¡Ah!, me gustaría que esta noche uséis el perfume «Saiyan nº5», es el más excitante, ¿no? Os dejo, Alteza, iré a prepararme.

Rya: Vete de una vez, maldito insolente, me tratas así porque el ritual te protege, pero ¡ya verás!

Rya se dirige a sus habitaciones, muy enojada, pero antes encuentra a un chambelán y le dice:

Rya: Chambelán, te ordeno que hagas todos los preparativos para un combate nupcial que se llevará a cabo dentro de dos horas.

Chambelán: Sí, Su Alteza, prepararé todo. ¿Quiénes se enfrentarán, si puedo saberlo?

Rya: Por supuesto, seremos el mariscal Nappa y yo. Quiero que le avises a Su Majestad, al príncipe y a toda la Corte, no quiero que nadie se lo pierda.

Chambelán: Sí, Alteza, enseguida, sólo que no tendré tiempo para preparar todo lo demás.

Rya: ¿De qué hablas, imbécil?

Chambelán: De vuestra boda, mi señora.

Rya (furiosa): ¡Maldito insecto! ¿Acaso estás insinuando que voy a perder? (Rya carga energía en su mano y la arroja contra el asustado chambelán que cae al suelo malherido. Ella se le acerca, le pone un pie en la garganta y le dice lo siguiente) Ahora, rata, cumplirás todas mis órdenes, te levantarás y harás lo que te indiqué. Si sigues en el suelo te remataré. (Lo patea con fuerza, el chambelán realiza un gran esfuerzo y consigue levantarse.

Chambelán: Perdón, Alteza, disculpadme, no me matéis, por favor.

Rya: Vete de una vez, basura, antes de que cambie de idea. (El chambelán se retira, apoyándose contra las paredes) ¡Nappa, ahora es tu turno! ¡Barreré el suelo contigo!
¿Qué pasará en la Tierra con nuestros amigos? ¿El rey Vegeta II creerá la explicación de Pikoro? ¿Terminará Nappa convirtiéndose en el cuñado de Vegeta?

¿Universos Paralelos? – Capítulo 4

Capítulo 4: «¿Su Alteza Real, la Princesa Rya?»

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Palacio real de Vegeta.

La última vez que estuvimos con Vegeta, en el mundo paralelo, él se desmayó de la impresión. Ya pasaron varias horas y se repuso en sus habitaciones.

Bulma II: Señor, me retiraré para que podáis dormir.

Vegeta: No, alcánzame mis atuendos reales. Iré a la biblioteca del palacio, así que anuncia mi llegada, no quiero que haya nadie allí, salvo el encargado de atenderme en hemeroteca, que es justo donde pienso ir.

Bulma II: ¿Consultaréis periódicos viejos, Señor? Si queréis puedo hacer que os los manden a vuestras habitaciones, así podréis descansar.

Vegeta (piensa): ¡Cómo me cuida! ¡Es increíble, pero debo disimular! (En voz alta): ¡De ninguna manera, mujer! ¿Crees acaso que soy un debilucho? Mira, mejor apártate y limítate a tus obligaciones.

Bulma II: (asustada): Sí, señor, enseguida. (rápidamente alcanza la ropa y sale, después de hacer una profunda reverencia)

Vegeta (piensa, mientras se viste): Con esta ropa me parezco a mi padre… Esto que pasa es realmente increíble, me pregunto si no me estaré volviendo loco, aunque… pensándolo bien… cuando llegó Trunks del futuro, también parecía increíble, y sin embargo sucedió. Tampoco parecía cierto lo de las esferas del dragón, sin embargo… Y lo más increíble de todo, yo, el príncipe de los saiyanes, dando mi vida en la lucha contra Buu para salvar la Tierra, el planeta que juré destruir ¡y como si eso fuera poco, cuando vuelvo de la muerte me fusiono voluntariamente con Kakarotto, a quien juré matar! Sí, realmente en este mundo suceden cosas muy raras. Pero ahora lo primero que debo hacer es averiguar lo que pasa y el papel que desempeño aquí.

Entonces, Vegeta se dirige a la biblioteca del palacio. la cual, afortunadamente, está en el mismo lugar donde él la recuerda, entra y pide al bibliotecario los principales periódicos del planeta desde 35 años atrás. El bibliotecario hace una selección y Vegeta se ubica en una mesa y lee:

Vegeta: «Freezer y su ejército son derrotados por su Majestad, el Rey Vegeta, su real hijo, el príncipe Vegeta y el guerrero Bardock» ¡Oh, derrotamos a Freezer, antes de que él nos eliminara! Y yo participé también. Un momento: ese Bardock… ¡es el padre de Kakarotto! ¿Estará también él aquí? ¡Qué pesadilla! Mejor sigo leyendo… «El príncipe Vegeta se convierte en el SSJ de la leyenda durante la batalla contra el tirano espacial Freezer». ¿Así que yo fui el primero que se convirtió? ¡Je! Aquí, por lo menos no me ganó de mano Kakarotto. Este lugar no está tan mal, después de todo. Sigamos: «Dolor en Vegeta. Nuestro gran monarca, Su Majestad, el rey Vegeta I, murió por las heridas que sufrió en la épica batalla contra Freezer. Su hijo, el Príncipe Vegeta, será coronado la semana que viene como Su Majestad, el Rey Vegeta II.»… Así que de esa manera murió mi padre… Entonces yo llegué al trono a los doce años… Hubiera sido preferible eso y no ser soldado de ese maldito durante tantos años… «El guerrero Bardock se convierte en el hombre de confianza del nuevo rey». «Su Majestad otorga el grado de Lord Principal y Conde al guerrero Bardock.» ¿Así que en este lugar el padre de mi rival es mi mano derecha? ¡Qué cosa más irónica! «Nuestro gran monarca decidió tomar el lugar de Freezer en el gobierno universal». «De ahora en adelante el ejército saiyan se dedicará a conquistar planetas, cuyas poblaciones esclavizará, si se someten, y destruirá en el caso de resistencia». ¡Vaya, de todas maneras esto es ‘mejor’ que lo que hacía Freezer». Veamos noticias más modernas, veré si encuentro algo sobre mi mujer y mi hijo. ¡Oh! Aquí está: «Hoy nació el heredero del trono, el Príncipe Trunks». «Su madre es una esclava terrícola que se destaca en la tarea de investigación». Es lo que me dijo ella… «Su Majestad dice: Mi hijo será el más fuerte de los guerreros porque, además de ser mi hijo, está demostrado que las uniones entre los saiyanes y otras razas como los terrícolas producen seres con inmensos poderes» …¡Entonces es por eso que mi contraparte hizo suya a esta Bulma! Creo que ya sé todo lo que necesito… Esto parece… Un universo paralelo, tal vez… una dimensión alternativa… ¡eso debe ser! ¿Pero por qué? ¿Cómo sucedió? ¡Ah, si aquí estuviera mi Bulma podría ayudarme a aclarar esto! Sin embargo ella está aquí… es ella… y no lo es…

Golpean a la puerta de la sala de lectura

Chambelán: Majestad, Su Alteza Real, la Princesa Rya, pide audiencia.

Vegeta: (muy asombrado piensa): ¡Mi hermana Rya! ¡Claro, ella también está aquí! Debe haber cambiado mucho, en mi línea de tiempo ella murió a los 11 años, cuando nuestro planeta fue destruido… (en voz alta): Chambelán, hazla pasar.

Entra Rya. Es una mujer alta y fuerte, medianamente atractiva, se parece un poco a su hermano con su sonrisa irónica y maligna. Sus cabellos son lacios y caen sobre sus hombros hasta la mitad de su espalda. Tiene un aspecto salvaje, lleva su cola enroscada en la cintura, como todos los de su raza, usa un amplio manto color rojo, una especie de corsé que modela sus formas femeninas y al mismo tiempo le sirve de armadura, unos pantalones negros muy ajustados y unas hombreras muy pronunciadas.

Rya: Hermano, necesito hablar contigo.

Vegeta (muy impresionado, pero tratando de disimular): Dime, ¿qué deseas?

Rya: Quiero pedirte que por un tiempo no me mandes a misiones de conquista, porque pienso que podré servir a tus intereses mucho mejor, si me quedara aquí por un tiempo, recuerda a esos conspiradores de la O.SA.PA.

Vegeta: ¿O.SA.PA.?

Rya: ¡Claro! ¿Acaso no recuerdas a la Organización de Saiyanes Pacifistas? Tú mismo me ordenaste que descubriera a los infames que osaron traicionarte y que los ejecutarías a todos.

Vegeta: ¡Saiyanes pacifistas! ¡Eso es el colmo! Es… imposible!

Rya (Con aire de suficiencia): Yo pienso igual y por eso te ayudaré.

Vegeta (trata de disimular): Me pregunto cómo es posible que los poderosos saiyanes no quieran pelear.

Rya (con cara de asco): Escuché que sólo piensan en vivir en paz y trabajar ¡desperdiciando sus poderes! Es una secta peligrosa que apareció hace un tiempo y se extendió como una peligrosa infección, aparentemente ahora sólo quieren que tú dejes en libertad a los pueblos que conquistamos con tanto trabajo o, si te niegas, lucharán contra ti, te matarán y tomarán el trono para llevar a cabo sus cobardes propósitos de paz.

Vegeta: ¡Es repugnante!

Rya: ¿Y, qué me contestas? ¿Puedo quedarme para investigar?

Vegeta: Sí, claro, tienes razón.

Rya: Entonces te pido permiso para retirarme.

Vegeta: Concedido, puedes irte.

Rya hace una reverencia y se va.

Vegeta (piensa): ¡Cómo se parece a mi madre! ¡Es igual! Parece mentira que haya podido volver a verla, después de tanto tiempo… ¿Así que en este mundo hay saiyanes pacifistas? ¡Ahí debe estar Kakarotto! Si los viera, mi padre se muere de nuevo. Me pregunto si podré contar con mi hermana para salir de ésta. Tal vez pueda confiar en esta Bulma, aunque no la reconozco. En mi línea de tiempo jamás la vi tan humilde y.. ¡cómo me respeta! ¡Y hasta me teme! ¡Ah, seguro que ese maldito la golpeó sin piedad para lograrlo! Bueno, ¿pero yo no quería eso? Además me estoy maldiciendo a mí mismo, ¿no? En fin, ya veremos, daré una vuelta por el palacio para investigar.

En otro lugar del palacio, Rya se encuentra con Bulma II

Rya: Bulma, quiero hablarte.

Bulma II: Estoy a las órdenes de Su Alteza (se inclina)

Rya: Se trata de Su Majestad, el rey

Bulma II: ¿Sí?

Rya: Hace unos instantes estuve con él y lo noté muy extraño, si bien estaba sentado me pareció que hasta había perdido la cola. ¿Tú qué dices?

Bulma II (con miedo de hablar): Ehhh, yo no sé qué decir, no soy nadie para juzgar el comportamiento de mi señor.

Rya (alentándola): Vamos, Bulma, puedes hablar tranquilamente conmigo, sabes que me agradas. Además, no olvido que eres la madre del heredero del trono, amén de ser la mujer de mi hermano, a pesar de tu condición de esclava. ¿Sabes?, a veces me pregunto qué tipo de vida habrás tenido en tu planeta. Me gustaría conocerlo, de veras.

Bulma II (muy asustada): ¡No, Alteza, Su Majestad me prometió que si yo le servía no atacaría mi planeta!

Rya (sonriendo): ¡Pero Bulma, tranquilízate, yo no pienso atacar la Tierra, de verdad! Sólo dije que me hubiera gustado conocerte allí, con tu gente. Anda, cuéntame todo lo que hacías allí, es una orden.

Bulma II (más tranquila): Bueno, yo era la hija de uno de los científicos más famosos de mi planeta, el Dr Brief, quien fue el que inventó el sistema de cápsulas que usamos aquí ahora. Vivíamos en el mismo centro de investigaciones, en una enorme casa, llamada Cápsule Corp. y yo me dedicaba a la investigación, al igual que mi padre. (Algunas lágrimas caen de sus ojos, pero Rya no les da importancia) Éramos muy felices… Un día yo fui a buscar información científica a ese planeta donde mi nave se rompió. Por casualidad también estaba allí Su Majestad, quien sin pensarlo dos veces me trajo hasta aquí. Lo demás ya lo sabe Su Alteza.

Rya: Vaya, es una historia interesante, de las que me gustan a mí. De todas maneras me parece que aquí no la pasas tan mal, ¿no? Tienes tu propio laboratorio, mandas a un grupo de científicos, tienes autoridad sobre los sirvientes y como si eso fuera poco, eres, hasta donde yo sé, la única mujer estable de mi hermano y la madre del heredero del trono. Aunque no lo creas hay muchos que te envidian.

Bulma II: Con su permiso, Alteza, le diré que no hay nada más importante que la libertad. Yo no tengo nada que decir de Su Majestad… (Rya la interrumpe, riendo, casi)

Rya: ¡Vamos, Bulma, eso no te lo cree nadie! Siempre hay algo para decir de mi hermano.

Bulma II: No, Alteza, contrariamente a lo que yo temía él cumplió todas sus promesas y no me maltrató demasiado.

Rya: Bien, tranquilízate y contéstame ¿Estás enterada sobre la O.SA.PA.?

Bulma II: Sí, Alteza.

Rya: ¿Qué opinas?

Bulma II: Son traidores a la corona.

Rya: Eso también lo sé yo, pero no es lo que te pregunto.

Bulma II (asustada): No lo sé, señora, yo no participo en ninguna conspiración, ¡créame!

Rya: ¡Qué miedo tienes! Yo te creo, sé que tú no estás en eso, pero pienso que según lo que me contaste podrías tener alguna simpatía por ellos. ¿Acaso no me hablaste de la libertad?

Bulma II: Jamás haría algo que perjudicara a mi señor, al padre de mi hijo.

Rya (Decide cambiar rápidamente de tema): Hablando del rey, vuelvo a lo que te pregunté al principio. ¿No lo notaste extraño?

Bulma II: Por la mañana estaba furioso sin razón (Rya la interrumpe)

Rya: Bueno, ése es su estado normal. A veces te compadezco, pequeña humana.

Bulma II: Además le faltaba la cola. Creo que debe haberla perdido en algún entrenamiento, por eso di orden a todos los sirvientes de palacio que ninguno de ellos mencionara el hecho.

Rya: Actuaste con prudencia, yo haré lo mismo con los nobles. De todas formas, ya le crecerá. Piensa sobre lo que hablamos antes. Ahora me retiro, tengo cosas muy importantes que hacer. (Rya se retira mientras repite por lo bajo) Veremos, veremos.
¿Qué pasará con el rey Vegeta II en la Tierra? ¿Podrán detenerlo Gokú y Gohan?

La Princesa Rya (dibujada por Alondra)
La Princesa Rya (dibujada por Alondra)
La Princesa Rya (dibujada por Lilibel)
La Princesa Rya (dibujada por Lilibel)

¿Universos Paralelos? – Capítulo 3

Capítulo 3: «¡Ayúdanos, Gokú! ¡Vegeta se volvió loco!»

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En el capítulo anterior, Vegeta aparecía en su planeta de origen, en el palacio real, mientras que su otro yo era llevado a la C.C.


Cápsule Corp, habitación de Vegeta.

Vegeta II: ¡Ay, qué cansado estoy! ¿Pero qué es ese maldito escándalo? ¡Ah, ya me las pagarán! (Asombrado) ¿Eh?, ¿qué es esto?, ¿dónde estoy? ¿Acaso…?

Entra Bulma con cara de pocos amigos.

Bulma: ¡Ah! Ya volviste, ¿eh? Te cansaste de estar haciendo tonterías por ahí, ¿no?

Vegeta II: ¿ QUÉ MANERA ES ESA DE DIRIGIRTE A MÍ, el rey de los saiyanes, el gran Vegeta II? ¿Acaso quieres morir? (Cambia de tono) Rápido, dime, dónde estoy, de qué se trata esto?

Bulma: ¡Ah, estás de broma!, ¿no? Mira, después de lo que hiciste anoche, no tengo ganas de soportar tus tonterías.

Vegeta II se levanta, furioso, y le da una bofetada a Bulma que la estrella contra la pared.

Vegeta II: ¡Toma, perra! ¡Ninguna insignificante mujer terrícola le hablará así al rey del planeta Vegeta!

Bulma se levanta, tambaleándose, muy lastimada, y mira al saiyan con extrañeza y miedo.

Bulma: Vegeta… ¿por qué lo hiciste? (Nota la cola de Vegeta II) ¡Oh, te creció de nuevo la cola!

Vegeta II: Cállate, bruja. ¿Cuándo me viste sin ella? Además, ¿acaso olvidas quién eres y quién soy yo? ¿Desde cuándo me tuteas y me llamas Vegeta, así, a secas? No eres más que mi concubina y yo soy tu señor, no permitiré que lo olvides, aunque tenga que matarte en el proceso.

Bulma (Aterrorizada, cree estar en presencia de un loco): Perdón, Majestad, debo irme, con permiso (dice mientras trata de escabullirse rápidamente por la puerta)

Vegeta II: Espera, todavía no te di permiso para retirarte. Perdonaré tu insolencia siempre y cuando me expliques dónde estoy.

Pero Bulma corre desesperadamente llamando a Trunks.

Bulma: ¡Trunks, ven, ayúdame, tu padre se ha vuelto loco!

Trunks, quien acaba de levantarse, sale de su habitación, corre por el pasillo y llega donde está su madre.

Trunks: ¿Qué pasa, mamá, qué dices?

Bulma: Es tu padre…, me golpeó…, dice que es rey…, mira cómo está vestido… ¡y además le creció la cola! [las ropas de Vegeta II, son similares a los atuendos del rey Vegeta en la primera parte de DBZ]

Vegeta II sale de la habitación entre furioso y confundido y se encuentra cara a cara con su hijo.

Trunks: ¡Papá! ¿Qué te sucede?… ¿Por qué traes esa ropa tan rara? Mira ese manto… ¡y ADEMÁS TIENES UNA COLA!

Vegeta II: ¿De qué hablas, príncipe? Mi ropa es la de siempre y… (Gritando) ¡Ya dejen de hablar de mi cola! (De pronto cambia de tono y cree comprender). Ah, ya comprendo, esto es un complot, ¡y están en él mi mujer y mi hijo! ¡No te saldrás con la tuya, Trunks! ¿Acaso quieres mi trono?… Me las pagarás y en cuanto a tu traidora madre ¡la mataré ahora mismo!

Entonces el saiyan prepara una bola de energía en su mano que arroja a Bulma, quien está paralizada por el terror, pero en el último instante el niño la desvía con una descarga. Ella aprovecha la distracción momentánea de quien cree su marido, para escabullirse y hablar por teléfono a Gokú.

Bulma: Sí, Chichi, ¿está Gokú?

Chichi: ¡Hola, Bulma! ¿Qué te pasa que pareces tan alterada?

Bulma: Vegeta se volvió loco, dile a Gokú que venga rápido a ayudarnos antes de que nos mate a mí y a Trunks.

Chichi: ¡Qué horror! Sí, ahora va con Gohan que también está acá.

Bulma cuelga y asiste, horrorizada, a la pelea que en ese momento tienen Trunks y su «padre».

Trunks: ¡Tranquilízate, papá, me matarás!

Vegeta II: Me traicionaste y pagarás por eso! ¡Big Bang Attack! (grita, mientras le lanza su ataque al niño, quien no alcanza a esquivarlo por completo y lo deja muy maltratado)

Es en ese momento llegan Gokú y Gohan, quienes muy asombrados se preparan a pelear. Vegeta II, entonces, mira a Gokú, muy asombrado y, furioso, grita:

Vegeta II: ¡BARDOCK! ¡Tú también estás en esto!
¿Bardock? ¿Qué habrá querido decir el rey Vegeta II? ¿Qué pasará en el planeta Vegeta?

¿Universos Paralelos? – Capítulo 2

Capítulo 2: «Un deseo imprudente»

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En el capítulo anterior, Vegeta se fue a pasar la noche afuera, porque su mujer le reprochó que él estuvo ausente en el cumpleaños de su hijo.


Cápsule Corp., dormitorio de Trunks.

Trunks duerme y en su rostro se ven huellas de lágrimas. Bulma se acerca y en silencio acaricia sus mejillas mientras piensa:

Bulma: No cambiará nunca, tal vez fue un error que confiara en él para formar una familia. Sólo le interesa luchar. Nunca será un padre, y lo peor es que él no ve nada anormal en su conducta. ¡Cómo me gustaría que alguna vez nos abriera su corazón! Pero siempre está a la defensiva, como si todavía se encontrara con Freezer. De todas formas, Trunks sufre mucho, él no se merece esto.


En la cueva de Vegeta.

Vegeta: (Pensando) Esta mujer está loca, definitivamente. A veces quisiera que fuera una guerrera para poder darle una buena paliza. ¿Qué pretende con eso de la ternura? Ya me tiene harto con la dulzura y todas esas mariconadas… «Vegeta, debes ser más dulce con el chico, Vegeta, sé más demostrativo, Vegeta, es el cumpleaños de Trunks». ¡Bah!, creo que ya me cansé. Tal vez debería volver a mi vida de mercenario espacial. Ahora ya no está Freezer y mi poder ha aumentado en forma inimaginable, tanto, que aunque estuviera, ya no sería rival para mí. ¡Ah, en realidad, lo que quisiera es estar en mi planeta y ser Su Majestad, el Rey Vegeta II!


En un lejano planeta.

Dos antiguos y malignos dioses, Talos y Secur, observan a Vegeta a través de una pequeña pantalla similar a una bola de cristal.

Talos: Mira a ese saiyan, siempre supe que se cansaría de su papel de esposo y padre.

Secur: No, es sólo un arranque, se le pasará.

Talos: No me parece. Oye, se me ocurre una idea, ¿quieres divertirte con él?

Secur: ¿De qué manera?

Talos: Lo mandaré a un universo paralelo donde el planeta Vegeta no fue destruido. Allí reemplazará a su otro yo, reinará, y además, en el universo al que lo mandaré, están los dobles de su esposa y su hijo, sólo que ella es mucho más obediente. ¡Ja, ja, ja!

Secur (asombrado): ¿Y qué harás con el otro Vegeta?

Talos: Lo mandaré a la Tierra.

Secur: ¡Pero hará un verdadero desastre en la Tierra!

Talos: Bueno, ése no es nuestro problema. Desde que conseguimos escapar de la prisión en la que nos encerraron los dioses Kaioh, nuestro poder aumentó muy por encima del de ellos, porque dominamos el tiempo y el espacio y además somos los más poderosos guerreros imaginables. Sin duda tenemos derecho de divertirnos. Por otra parte, sería conveniente que la Tierra se destruya, ya que allí viven los últimos saiyanes y semisaiyanes, quienes serían los únicos capaces de hacernos frente en caso de que decidiéramos conquistar el universo.

Secur: Evidentemente eres un tonto, ¡quieres deshacerte de los saiyanes y mandas a uno de los más poderosos a un lugar donde su planeta no fue destruido!

Talos: El tonto eres tú, ¿no te das cuenta de que se trata de un mundo paralelo y que por lo tanto Vegeta nunca podrá salir de allí? Esos brutos saiyanes jamás inventarán algo que se los permita. Además, él no sobrevivirá mucho tiempo allí, probablemente, porque cuando noten sus numerosos tics terrestres, lo asesinarán.

Secur: Así mataremos dos pájaros de un tiro: el otro Vegeta destruirá la Tierra y el de aquí, tal vez sea asesinado. ¡Entonces nadie podrá detenernos!


De vuelta en la cueva, con Vegeta…

Vegeta: ¡Oh, qué sueño tengo! (Mira muy asombrado) ¿Qué es ese torbellino? (Se acerca y comienza a ser absorbido) ¡¡¡¡¡¡Ahhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!!

Amanece en el planeta Vegeta, en el mundo paralelo.


Palacio real.

(DE AHORA EN ADELANTE AGREGARÉ EL N° II A LOS OTROS YO DE BULMA, VEGETA Y TRUNKS)

Bulma II (dirigiéndose a un montón de sirvientes que llevaban el enorme desayuno de Vegeta): Dejen aquí el desayuno y no hagan ruido, Su Majestad me dijo anoche que el que lo despierte lo pagará caro.

Sirvientes: Sí, señora, no haremos ruido (dejan la comida y se alejan más que rápidamente)


En las habitaciones de Su Majestad…

Vegeta: ¿Cómo, ya es de día? ¿Qué me pasó? Me duele la cabeza… ¡eh! (Espantado) ¿Dónde estoy?… Ésta no es mi cueva, sin duda, más bien parece… ¡¡LAS HABITACIONES DE MI PADRE EN EL CASTILLO REAL DEL PLANETA VEGETA!!… (Se frota los ojos) No, eso no es posible, mi planeta ya no existe y yo estoy en la Tierra, ¿o no? Debe ser un sueño ¡eso es, estoy soñando! (Se tranquiliza un poco). Bien, ayer hubiera deseado estar aquí, trataré de aprovecharlo. ¡Qué tonterías estoy diciendo! Mejor me levantaré e investigaré la situación. (Vegeta se levanta y comienza a correr por las habitaciones, descontrolado, finalmente toma la manija de la puerta y sale al pasillo).

Bulma II: ¡Mi señor! ¡Estáis despierto! Me dijisteis anoche que ibais a dormir hasta tarde y que no permitiríais que nadie os despertara… (preocupada) ¿acaso hicimos ruido? ¡Perdonadnos por favor! (Se pone de rodillas e intenta besar los pies de Vegeta, quien la mira con la boca abierta)

Vegeta: ¿Qué está pasando aquí? ¿Esta es una broma tuya, verdad? (Su cara se ilumina) ¡Eh! Ya sé: reprodujiste en cápsulas el palacio real de Vegeta y luego, de alguna manera, tal vez con la ayuda de Kakarotto, me trajiste aquí… pero, ¿por qué? ¿Y cómo supiste los detalles? (ya dudando un poco) Seguro que es una broma tuya…

Bulma II (con actitud humilde): No, mi rey, yo no sería capaz de semejante insolencia. Por otra parte, no entiendo lo que decís, os ruego que os expliquéis mejor. (Mira de repente la cintura de Vegeta, muy asombrada) ¡SEÑOR, QUÉ PASÓ CON VUESTRA COLA!

Vegeta (gritando como loco): ¡¿DE QUÉ HABLAS, MUJER, POR QUÉ ESTÁS TÚ EN MI PLANETA? CONTÉSTAME DE UNA VEZ, ¿ES UNA BROMA?

Bulma II (Muy asustada y temblando): Señor, os ruego que no os enojéis más, ¿acaso no recordáis que ya hace muchos años, cuando me encontrásteis en el planeta Grotch, con mi nave espacial en una misión científica, me llevasteis con vos y prometisteis, si os servía debidamente con mis conocimientos, no atacar, al menos por el momento, mi planeta de origen, la Tierra? Cumplisteis vuestra promesa y yo os di un hijo, a quien reconocisteis como vuestro heredero, el príncipe Trunks.

Vegeta: ¿¿¿¡¡¡QUÉEEEEE???!!! (Se desmaya)
¿Qué pasará con Vegeta en el otro universo? ¿Qué barbaridades hará el otro Vegeta cuando se vea en la Tierra? Lo veremos en el próximo capítulo.


¿Universos Paralelos? – Capítulo 1

Capítulo 1: «Una promesa incumplida»

Fanfic: ¿Universos Paralelos?


Ya pasaron tres años desde la derrota de Boo y es la hora del almuerzo en el salón comedor de CÁPSULE CORP.

Trunks: Mamá, ¿crees que papá llegará a tiempo para la fiesta de esta noche?

Bulma: No lo sé, debe estar entrenando por ahí, para variar.

Trunks: Pero mamá, hoy es mi cumpleaños y él prometió llegar a tiempo, ¿no?

Bulma: Sí, claro (pensando): Si supiera que me dijo que esas cosas no tienen importancia… hum…

Suena el teléfono.

Trunks: Voy yo, mamá (atendiendo el teléfono) ¡Hola! ¡Oh!, muchas gracias, Goten. ¿Vas a venir esta noche a mi casa? Mi mamá preparó mucha comida. Bueno, te espero.


En otro lugar de nuestro planeta.

Vegeta entrena sin descanso, tratando de superar su límite.

Vegeta: ¡Uf, qué cansado estoy! Pero no me rendiré, hasta que no consiga llegar a SS3 como Kakarotto, no dejaré de entrenar, y entonces tampoco lo haré. Les demostraré a todos quién es el príncipe de los saiyanes, y en especial a mi mujer, que no me respeta como debe. En realidad, esa parece ser una característica de las mujeres de este planeta. ¡Cuándo me acuerdo de Kakarotto y su mujer!… o de ese tonto pelado de Krilin y esa androide prepotente, ¡peor aún! Tal vez debería haber destruido el planeta apenas llegué a él la primera vez… pero entonces no tendría a Trunks… ¡ése sí que será un guerrero!… ¡y superará a los hijos de Kakarotto! Tiene que ser así, porque yo soy un guerrero de clase alta… ¡Cómo maldigo a Freezer! Si viviera en Vegeta sería el rey, y mi mujer tendría que obedecerme ciegamente. Me pregunto cómo sería mi vida. ¡Bah! Debo seguir entrenando, de otra manera jamás llegaré a SS3.

Y Vegeta lanzó tantos rayos, bolas de energía y concentró tanto su ki que no notó que ya era medianoche y él seguía en el mismo lugar lejos de su casa…


A la una de la mañana, en C.C.

Gokú: Bueno, nos vamos, que ya es muy tarde. Muy rica la comida. Lástima que Vegeta no pudo venir.

Chichi: (Dándole un codazo a su marido mientras le dice en voz baja) Cállate ya. (En voz alta) Bien, nosotros nos tenemos que ir.

Bulma (nota la situación): No se preocupen, no es la primera vez que Vegeta hace estas cosas. Tal vez haya sido mejor así, porque con su carácter intolerable nos hubiera amargado la noche, pero lo siento por Trunks, lo admira mucho (no sé por qué) y está muy desilusionado –dice mientras mira al niño, quien está despidiéndose de su amigo.

Todos se despiden afectuosamente y Bulma y Trunks quedan solos.

Trunks: Mamá, ¿por qué papá no me quiere?

Bulma: Claro que te quiere, sólo que él es así, no está acostumbrado a las demostraciones.

Trunks: ¿Siempre fue así?

Bulma: No, antes era mucho peor.

En ese momento, Vegeta entra agotado, sucio y transpirado por la puerta del comedor.

Trunks: ¡Papá, hoy fue mi cumpleaños!, ¡te olvidaste!

Vegeta: Este sentimentalismo me tiene cansado. Escúchame, Trunks, estuve entrenando mucho y me olvidé. Este día no tiene nada de especial, recuerda que tú eres mi hijo, no un patético humano como los amigos de tu madre.

Trunks: Papá, al menos dame un beso por mi cumpleaños (se acerca).

Vegeta (rechazándolo): Déjame en paz, entrené todo el día y no logré superar el SS2.

Bulma: ¡Vegeta! ¡No puedo creer que trates así al niño, él no tiene la culpa de tus problemas!

Trunks (llorando): Yo me voy a acostar, mamá. (sale corriendo)

Vegeta: Déjalo, que se vaya a dormir.

Bulma: ¡Es increíble que no seas un poco más cariñoso con el chico! Ni siquiera quisiste darle un beso. A un perro lo tratarías mejor.

Vegeta: ¡Bah! Tengo cosas más importantes de qué ocuparme. Tú lo quieres criar como maricón. Estás desperdiciando su herencia de guerrero. Con respecto al perro, si se me acercara hoy, le tiraría un rayo y ¡puf! (Cambiando de tono) Anda, vamos a dormir, se me ocurre una forma de superar la frustración.

Bulma (lo rechaza bruscamente): ¡Cómo puedes pretender eso después de tratar así a nuestro hijo! ¡Tienes que ser más cariñoso con él, más dulce! Eres demasiado duro.

Vegeta: ¡Cómo que yo debo ser dulce! ¿Estás loca, mujer? ¿Con quién crees que hablas? ¿Dulce yo? ¡Un guerrero saiyan no es nada de eso! Si estuviera en Vegeta, él, ya, a sus doce años, hubiera participado en un sinfín de misiones y matado a muchísimos enemigos. Ésos eran los buenos tiempos.

Bulma: Veo que no has cambiado nada.

Vegeta: Claro que no, ¿qué pensabas? Yo no soy Kakarotto, ¿o acaso olvidaste para qué vinimos con Nappa a la Tierra?

Bulma: No tienes sentimientos, tienes un corazón de piedra, Vegeta.

Vegeta: Bueno, no tanto, hace un momento te hice una proposición que rechazaste, no sé por qué.

Bulma: Yo no puedo estar con un hombre que no quiere a su hijo.

Vegeta: Mira, Bulma, por última vez, no sé por qué dices eso. Mejor me voy a mi refugio.

Y Vegeta salió furioso, volando, hasta llegar a su refugio.

En el siguiente capítulo veremos cómo las consecuencias de este episodio pondrán en peligro la paz de la Tierra.