Nuestra vida juntos
Capítulo 6: "Dietas estrictas"
Como Bulma tuvo que salir ese día, Vegeta aprovechó para salir también, claro que no a entrenar, sino a comer. Arrasó con un restaurant donde no podían creer todo lo que se había tragado. Luego siguió caminando por las calles de la ciudad y cuando veía algo delicioso en alguna vitrina, entraba y se comía 10 porciones.
- VG: ¡Aaaaaah! Ésta sí es comida, pero ya se ha hecho tarde, será mejor que vuelva a casa, si no, Bulma va a sospechar.
¿Desde cuando Vegeta se preocupa de la hora de llegada y de que sospechen de él? Era obvio que la culpa lo estaba carcomiendo por dentro. No porque pudiera enfermarse de nuevo, sino porque Bulma se preocupaba por él, y él hacía caso omiso de sus consejos. Era cierto que ya se sentía bien, pero ella no podía evitar preocuparse por él, así que se propuso buscar la manera de agradecérselo.
- VG: ¡Ah!, pero antes creo que compraré algunas provisiones para los días que quedan.
Dicho esto se dirigió a un supermercado y compró algunas cosas. Cuando llegó a la C. Cápsula, Bulma todavía no había llegado, así que llevó lo que había comprado a la cámara de gravedad.
- VG: ¡Listo! Aquí no podrá encontrarla dijo acomodando la comida.
- BL: ¿Vegeta? lo llamó Bulma.
- VG: "Oh-oh, ya llegó" pensó saliendo de la cámara de gravedad "De seguro va a querer enchufarme esa comida desabrida"
Bulma estaba acomodando algunas de sus compras y se volteó a ver a Vegeta cuando se asomó a la puerta.
- BL: ¡Ah! Ahí estás, ¿cómo te has sentido? le dijo mientras lo abrazaba.
- VG: Eeeeh... bien le respondió rodeándola con sus brazos.
- BL: Te felicito. Acabo de abrir los estantes y no falta absolutamente nada. Te has portado muy bien le dijo acariciándole el pecho.
- VG: Sí, pero... ya me aburrí de portarme bien, así que creo que empezaré a portarme mal le dijo sonriéndole y luego la besó.
En eso estaban cuando sonó el teléfono.
- VG: No contestes le dijo mientras la besaba en el cuello.
- BL: Puede ser algo importante dijo tratando de acercarse al teléfono, mientras Vegeta la sujetaba.
- VG: No creo que más importante que esto trató de atraerla de nuevo.
- BL: Dame un minuto, ¿sí? le dijo zafándose al fin de entre sus brazos.
- BL: ¿Hola? ¡Ah! Hola, Gokú. ¿Cómo estás?
- VG: "¡Ja! Tenía que ser el inútil de Kakarotto" pensó fastidiado.
- BL: ¡Claro! No hay ningún problema. Nos vemos.
- VG: ¿Qué quería ese idiota?
- BL: N-nada importante le respondió prefiriendo no decirle que Gokú y los demás vendrían a cenar al día siguiente.
- VG: Viniendo de Kakarotto no me extraña. Lo que sí me sorprendería sería que dijera algo realmente importante.
- BL: Vegeta, no seas pesado. Mejor voy a preparar tu cena dijo acercándose al refrigerador y al abrirlo se sorprendió. ¡Vaya! También está intacto...
- VG: ????
- BL: Creí que te lo comerías todo mientras yo no estaba.
- VG: ¿Ah, sí? dijo nerviosamente.
- BL: ¡Pobrecito! Debes estar muriéndote de hambre.
- VG: Bueno... no precisamente.
¡Claro! Cómo iba a tener hambre si se había comido todo cuanto había encontrado. Poco le faltó para comerse las casas y los árboles.
- BL: ¿Te volviste a sentir mal? le preguntó preocupada.
- VG: No, nada de eso, es sólo que no tengo hambre. Tal vez ya me acostumbré a esas cosas que me has estado preparando, y puede que se me esté achicando el estómago.
(Eso no se lo creyó ni él mismo)
- BL: Bueno, hoy puedes elegir entre fruta o ensalada.
- VG: Mmmm, creo que me comeré una manzana.
- BL: De acuerdo dijo mientras sacaba una manzana del frutero. La lavó y se la extendió a Vegeta. Aquí tienes.
- VG: Eso me recuerda algo dijo cogiendo la manzana.
Después que Bulma terminó de acomodar las cosas que había comprado, subieron a su cuarto y... bueno, usen su imaginación.
Al otro día...
- BL: ¡¿Vegeta?! gritó desde la cocina, y cuando llegó le dijo: aquí tienes tu remedio y tu desayuno.
- VG: ¡Ah! Gracias dijo sin ánimo, ya que su verdadero desayuno lo estaba esperando en la cámara de gravedad.
Vegeta se estaba tomando su té cuando Bulma le dijo:
- BL: Hoy vendrán Gokú y los demás a cenar.
Vegeta escupió el té y comenzó a toser.
- VG: ¿Qué dijiste? dijo, volviendo a su color original.
- BL: Que vendrán a cenar.
- VG: ¡No, mujer, NO!
- BL: ¿Y por qué no?
- VG: ¡Porque no! dijo levantando la voz.
- BL: Vegeta, por favor... ¡¡¡Madura!!! le dijo mientras salía de la cocina.
Vegeta se fue a su cámara de gravedad y se puso a entrenar para echar afuera toda su rabia. Ella no entendía lo que significaba para él tener que convivir con Kakarotto y las demás sabandijas, aunque sólo fueran unas horas. ¡¡Grrr!!
Aunque parezca extraño, no tocó ni una sola de sus "provisiones", de hecho ni se acordó de que tenía hambre, ni de la hora, hasta que miró por una de las ventanas de la cámara de gravedad y vio que el cielo se había tornado rojizo.
- VG: ¡Cielos!, ya es tarde dijo tomando su camiseta. Luego salió de la cámara y se dirigió a su habitación.
Se duchó, se vistió y bajó a la cocina donde esperaba encontrar a Bulma. El problema es que no sólo la encontró a ella, también estaban Gokú, Gohan y Krillin.
"¡¡Demonios, lo único que me faltaba!!" pensó mientras respiraba profundo y entraba a la cocina, pero también pensó "A lo mejor Bulma me deja comer algo ahora que vinieron esos inútiles"
¡¡Hola, Vegeta!! dijeron los tres en coro.
Vegeta los miró uno por uno y después miró a Bulma y pensó que lo mejor sería seguirles la corriente si quería que ella le diera algo decente para comer.
- VG: Hola... masculló en voz baja.
- GK: ¡Ven, siéntate aquí! Bulma ya iba a servir la cena. Por cierto, nos comentó que estabas algo enfermo.
- VG: No fue nada y ya me mejoré.
- KL: ¿Y cómo va tu entrenamiento?
- VG: Supongo que mejor que el tuyo, enano dijo irónicamente. ¡Ah! Eso se ve delicioso dijo mientras veía los platos con tallarines, carne, ensalada y muchas otras cosas que Bulma sirvió en la mesa.
- GK: ¡Es cierto! Bulma, eres una excelente cocinera.
- GH: ¡Sí! Tan buena como mamá.
- BL: Bueno, basta de cumplidos. Sírvanse, muchachos.
- VG: ¡Eso júralo! dijo Vegeta sentándose a la mesa y disponiéndose a tomar un plato de tallarines.
- BL: Ah-ah-ah, tú comerás esto le dijo sirviéndole un plato con lechuga, un huevo duro y unas zanahorias picadas.
- VG: ¿Qué? Pero yo no quiero verduras, quiero comida auténtica, como tallarines con carne... Ellos están comiendo tallarines con carne.
- GK: Y realmente están deliciosos dijo Gokú con la boca llena.
- BL: ¡¡Gokú!! lo regañó Bulma.
- GK: Lo siento, no recordaba que Vegeta estaba engordando y por eso tuvo que ponerse a dieta dijo inocentemente, porque él creía que sólo se hacen dietas para bajar de peso.
- VG: ¡¡Óyeme bien, Kakarotto!! Yo no estoy comiendo estas porquerías por eso. ¡¡ADEMÁS, YO NO HE ENGORDADO!! gritó golpeando la mesa muy molesto.
- BL: Es verdad, Gokú. Vegeta tuvo un problema al estómago y por eso tiene que cuidar lo que come. Además, las dietas no sólo se hacen para bajar de peso, también cuando uno está enfermo.
- GK: Vaya, no lo sabía... Lo siento, Vegeta. Realmente espero que te alivies pronto, yo no podría pasar un solo día comiendo eso.
- VG: Ya te dije que ya me mejoré dijo más tranquilo.
Vegeta los miró devorar toda la comida de los platos y cuando Gokú se iba a comer el último trozo de carne, Vegeta trató de quitárselo y empezaron a forcejear.
- VG: ¡Dame eso!
- GK: ¡No, es mío! protestaba Gokú.
- VG: El que vive en esta casa soy yo, por lo tanto a mí me corresponde esa comida dijo al instante que se lo quitó, pero cuando lo iba a morder, Bulma intervino.
- BL: ¡Vegeta! Antes de que lo muerdas, deberías saber que con lo enfermo que estuviste, comerte eso sería como tragarte una granada.
- KL: Una granada llena de salsa le dijo Krillin para molestarlo.
- BL: ¡¡Krillin!!
- VG: Correcto, no lo comeré. Pero me encantaría tener una granada dijo mientras le dirigía una mirada fulminante a los tres que se habían comido "SU" cena.
Vegeta salió de la cocina y se fue a la sala donde encendió la televisión, aunque, como siempre, no encontró nada que le interesara. Luego que terminaron de cenar, todos fueron a hacerle compañía, lo que obviamente no le agradó mucho.
Vegeta aguantó olímpicamente 15 minutos, y cuando se disponía a retirarse, llegó Gohan, que no había estado en el salón con ellos, cargando un canasto lleno de comida, la comida que Vegeta había escondido.
- GH: Tenías razón, Bulma. Vegeta tenía comida en la cámara de gravedad dijo Gohan dejando en el suelo el pesado canasto.
- VG: ¿¿Qué?? exclamó Vegeta al verse descubierto.
- BL: Mmmm, ya me parecía extraño que no tuviera hambre dijo Bulma mirándolo. ¿Y qué había?
- GH: Fruta en conserva, bebidas, sandwichs, papas fritas y salchichas.
- BL: ¿Salchichas? ¡Ay, Vegeta! dijo golpeándose la frente con la mano.
- VG: ¿Y qué querías? Si me estabas matando de hambre.
- BL: ¡¡Porque estabas enfermo!!
- VG: ¡¡Pues ya me mejoré!!
- BL: ¡¡Son tres días!!
- VG: ¡¡Pues así no aguantaré ni tres minutos!!
- GK: Eeeeh... muchachos... creo que... nosotros ya debemos irnos dijo Gokú jalando a Gohan y a Krillin, dispuesto a teletransportarse.
- VG: Ya me las pagarás tú, enano gruñó Vegeta apuntando a Gohan con un dedo y mirándolo fríamente.
Un rato después, ambos estaban en su habitación. Bulma se cepillaba el cabello y Vegeta estaba acostado en la cama mirando el techo de la habitación e imaginándose que las sombras que se formaban tenían forma de comida.
- BL: Tu remedio dijo enfadada todavía.
- VG: Ya me lo tomé contestó igual de molesto.
- BL: ¿Tienes hambre? dijo tratando de calmarse.
- VG: NO.
- BL: Vamos, yo sé que sí.
- VG: Prefiero aguantarme el hambre a comer lo de la condenada dieta.
- BL: Vegeta, ¿por qué no cooperas conmigo?
- VG: ¡¡Porque no!!
Bulma se metió a la cama, apagó la luz y se durmieron.
A eso de las 2:30 am, Vegeta se levantó cuidando no hacer ruido y bajó a la cocina.
- VG: "Necesito comer algo o moriré" se dijo a sí mismo mientras encendía la luz de la cocina y abría el refrigerador. "A veeeeer... ya sé: helado" dijo mientras sacaba un envase de helado de frutilla, junto con la salsa de chocolate y la crema chantillí (de esa que viene en lata y sale como moose para el pelo), lo dejó todo en la mesa y fue a buscar la cuchara más grande que había.
Abrió el envase de helado, le vació prácticamente toda la salsa de chocolate y encima le puso una montaña de crema chantillí. Estaba muy concentrado en eso y no se dio cuenta de que ya lo habían descubierto. Cuando sacó la primera cucharada y se la iba a echar a la boca, escuchó:
- BL: ¿Pero qué estás haciendo?
Vegeta saltó del susto.
- BL: Hace mucho tiempo que tengo ganas de comer helado de frutilla y por eso lo compré, así que no dejaré que te lo comas solo.
- VG: ???, "No le molestó que estuviera comiendo, sino que me estuviera comiendo "su" helado. Hay algo muy extraño aquí"
- BL: ¡Ya pues, convídame!
- VG: Eeeh, c-claro.
Los dos empezaron a atacar el envase de helado hasta que lo vaciaron por completo.
- BL: Bueno, ya me desantojé. Puedes comer lo que quieras. No habrá más dieta, pero vas a seguir tomándote tu remedio, ¿de acuerdo? Yo me voy a dormir.
Vegeta se quedó muy extrañado de esta reacción, pero no lo pensó dos veces y le hizo caso. Vació el refrigerador.