Jaki – Capítulo 1

Fanfic: Jaki


En la Mansión Satan…

Satan: Bien, bien, sigan así.

???: ¡Auch! Con calma, Jaki, es sólo entrenamiento, no pegues tan duro.

Jaki: Lo siento, lo siento.

Han pasado ya casi once años desde aquel enfrentamiento contra Buu y la destrucción y reconstrucción de la Tierra. Los Guerreros Z han vivido un largo período de paz. Hace cinco meses fue el torneo número 28 de artes marciales, donde Goku se encontró con un pequeño llamado Uub, y se lo llevó a entrenar al templo sagrado de Kamisama; no se ha sabido mucho de ellos desde entonces. Gohan ahora tiene 28 años y trabaja en la Corporación Cápsula junto con Videl; la pequeña Pan ya tiene 5 años, mientras que Goten tiene 18, Trunks 19, Bra 4 años y Marron 14.

Satan sigue siendo el héroe y campeón del mundo y entrena a un grupo de estudiantes en su casa todas las tardes, entre ellos: Jaki.

Satan: ¿Qué pasa, Jaki?

Jaki: Mis oponentes son muy débiles, quiero pelear con usted.

Satan: Pero si eso quieres todos los días. ¿Por qué sigues asistiendo a mis clases si ya sabes todo lo que tienes que saber?

Jaki: Porque quiero ser más fuerte. No me iré de aquí hasta que sea tan fuerte como usted, y la única forma de lograrlo es practicando y peleando con usted.

Satan: Está bien, pero pelearemos luego.

En eso llega Videl.

Videl: Hola, papá.

Satan: Hola, cariño. ¿Qué te trae por aquí?

Videl: Vine a buscar una ropa que dejé acá la última vez.

Jaki: Hola, Videl. ¿Peleas conmigo?

Videl: Em… no, gracias, creo que me tengo que ir.

Jaki: Por favor, Videl. Ya ni recuerdo la última vez que luché contigo. Ni siquiera sé si ya te igualé o no en fuerza y agilidad.

Videl: No lo creo, aún no me has igualado, aunque te has vuelto muy fuerte, Jaki.

Jaki: ¿Cómo sabes que no te he igualado? Yo he entrenado y tú no. Perfectamente puedo haberte alcanzado.

Videl: Bueno, bueno, lo que digas.

Jaki: Encuentro una tontería que dejaras de entrenar con tu padre.

Videl: Oye, no me critiques.

Jaki: Pero es cierto. Primero, dejaste de entrenar con ganas; luego, empezaste a faltar a las prácticas; y ahora apenas vienes de visita. Debes haberte puesto muy débil.

Videl: No es cierto. Me voy.

Videl sale de la mansión con Jaki siguiendo sus pasos.

Jaki: Me dejaste hablando sola. ¿Por qué dejaste de entrenar artes marciales?

Videl: Hemos hablado de esto ya muchas veces, Jaki.

Jaki: Y nunca me has dado una respuesta convincente. Me das lástima, Videl.

Videl: ¡¿Qué?! ¡¿Por qué?!

Jaki: Sé que era pequeña en ese entonces, pero los estudiantes más viejos me contaron que fue desde que empezaste a salir con Gohan que dejaste de entrenar. Pensé que tú eras una mujer independiente de los hombres.

Videl: Gohan no tiene nada que ver con esto… Bueno, sí, pero no fue él la razón, o sí… eso no te importa, Jakeline.

Jaki: Cuando era pequeña siempre peleabas conmigo; ya ha pasado mucho tiempo…

Videl: No ruegues, que no me convencerás de pelear contigo.

Jaki: ¿Acaso tienes miedo?

Videl: ¡Claro que no!

Jaki: Entonces, por lo menos explícame tus razones, así no te molestare más.

Videl: Es sólo que ahora me ocupo de otras cosas, mi trabajo en la Corporación Cápsula me quita todo mi tiempo y mis tiempos libres los ocupo para mi familia, y… y…

Jaki: …y no se te ocurre nada más.

Videl: Cierto, y no necesito decir más tampoco.

Jaki: Pero…

Marron: Hola, Videl.

Jaki estaba tan concentrada en la conversación que no se dio cuenta de lo alejadas que estaban de la mansión Satan. Ahora estaban en un pequeño parque verdoso.

Videl: ¿Qué haces aquí, Marron? Deberías estar entrenando junto con Pan y Bra.

Marron: Recuerda que hoy es lunes, mi mamá no nos entrena los lunes porque se va de compras.

Videl: Oh, por Dende, se me olvidó, y yo le dije a Pan que fuera a Kame House hoy en la mañana.

Marron: no te preocupes, tanto ella como Bra están acá en el parque jugando. Mi papá tuvo que hacer de niñera la mayor parte del día y ahora te llevaba a la niña a tu casa cuando quisieron ponerse a jugar.

Videl: Lo siento mucho.

Marron: No hay problem…

Jaki: ¡Ejem! Videl, estaba hablando contigo.

Videl: Oh, perdón. Jaki, ella es Marron.

Marron: Hola. Videl, ¿te llevas tú a Pan, o quieres que me la lleve yo?

Videl: No, yo me la llevo, voy a buscarla.

Jaki: ¡Videl!

Videl: Sólo espera un poco.

La hija de Satan se aleja en busca de Pan. Jaki queda sola con Marron.

Marron: Entrenas artes marciales, ¿no?

Jaki: Sí, ¿cómo supiste?

Jaki se mira a sí misma para ver qué la delataba.

NOTA: Hasta ahora se me había olvidado decir cómo es físicamente Jaki. Bueno, es una chica normal de estatura mediana, con el pelo castaño oscuro, largo hasta la cintura, tomado en una trenza, pero con varios cabellos sueltos que continuamente se saca de la cara, y unos ojos grandes color verde claro. Ah, y tiene casi 18 años.

Jaki: No traigo un uniforme ni nada.

Marron: Er… intuición femenina.

Jaki: Entonces también sabrás que yo soy una de las mejores, casi tan fuerte como el gran Mr. Satan.

Marron: Ah, sí.

Jaki: No pareces muy interesada.

Marron: No lo estoy.

Jaki: Qué chica tan rara… Hey, ¿quiénes son esos chicos guapos que acaban de llegar y están con Videl? El de cabello morado es realmente lindo.

Marron: Hola, chicos.

La hija de Krilin saluda a los recién llegados y camina hacia ellos. Jaki la sigue.

Marron: ¿Cómo te fue en tu primer día, Trunks?

Trunks: Bastante bien. Al principio estaba un poco nervioso, pero se me pasó luego.

Videl: Lo importante es que te hayas sentido cómodo. Más que más, eres el segundo sayajin que llega a la universidad.

Marron: Ya sabes, Goten: eres el siguiente.

Goten: Ya sé, no me lo recuerdes.

Jaki: ¡Ejem!

Videl: Oh, Jaki, aún estás aquí, perdón, no me había dado cuenta. Chicos, ella es Jakeline.

Trunks: Mucho gusto, Jakeline. Yo soy Trunks, y él es mi gran amigo Goten.

Jaki: Hola, pueden llamarme Jaki.

Goten: Bien, Jaki, ¿de qué conoces a Videl?

Jaki: Entreno artes marciales con su padre, ya saben, el gran Mr. Satan, ¿y ustedes?

Videl: Goten es el hermano menor de Gohan.

Jaki: Ajá, entonces ustedes deben saber el porqué Videl dejó de practicar artes marciales.

Marron: ¿Dejaste de entrenar, Videl? ¿Desde cuándo?

Jaki: Pensé que sabrían, desde hace nueve o diez años.

Goten: No es cierto, ¿de dónde sacaste eso?

Jaki: ¿Entonces has seguido entrenando, Videl? ¿Por qué no me lo dijiste?

Videl: Pues… tú nunca hubieses entendido, todavía eres una cría. Como soy una adulta, tengo un trabajo y una familia que atender, y me guardo sólo mi tiempo libre para entrenar. Si te lo hubiese contado, seguro insistirías para que dejara mi trabajo y volviera a dedicarme del todo a las artes marciales, pero yo estoy feliz así, ya me basta con que insistas todo el tiempo para que pelee contigo.

Jaki: Ah…

Videl: Ay, ya se me fue la hora, me tengo que ir.

Jaki: Pero me debes un combate.

Videl: En otra ocasión, Jaki. Despídete, Pan.

Pan: Chao, nos vemos mañana.

Bra: Claro, chao.

Pan y Videl se alejan caminando rápidamente, dejando a Jaki sola con Trunks, Goten, Marron, y Bra.

Goten: ¿Otra vez mandaron a las niñas a Kame house el día equivocado?

Marron: Sí, pero una entiende… Tanto Bulma como Videl son mujeres ocupadas, y bastante distraídas; es mejor que mi papá vigile a las pequeñas, y que mi mamá las entrene, ella no tiene problema con eso.

Trunks: Especialmente porque le pagan por hacerlo.

Marron: ¿Preferirías que tu hermana entrenara con tu padre?

Trunks: Todo menos eso, si yo salía mal de las practicas con él, sería un infierno para Bra.

Jaki: ¿De qué tipo de entrenamiento hablan?

Marron: ¿Que no es obvio? De artes marciales.

Jaki: ¡Ésas dos niñas entrenan desde tan pequeñas! Sabía que Pan era la excepción, pero pensé que era porque es la nieta de Mr. Satan. ¿Qué edad tiene ella?

Trunks: Bra tiene 4 años.

Jaki: Y yo que creía haber empezado joven…

Trunks: ¿A qué edad empezaste tú?

Jaki: A los 6 años. Desde ya hace 12 años que practico con Mr. Satan.

Goten: ¿Por qué encuentras eso tan extraño eso? Todas las personas que conozco empezaron a entrenar como a esa edad, incluyéndome, y a estos dos también.

Trunks: Cambiemos de tema. ¿Qué harás para tu cumpleaños, Marron?

Marron: Falta mucho para eso, aún no lo sé…

Jaki: ¿Por qué cambiaron el tema? Era más interesante lo que hablaban antes. Por alguna razón ustedes me son cara conocida… ¿Sus padres son conocidos artistas marciales? ¿Son buenos?

Trunks: Sí, son buenos, y no, por suerte, no son conocidos. Por lo menos no ahora.

Jaki: ¿Cómo no ahora? ¿Antes lo eran?

Goten: En sus momentos.

Jaki: Ya… pues, ustedes dos se ven muy fuertes, aunque tú no pareciese que supieras ni un poco del tema. ¿Practicas sólo por hobbie?

Marron: Me ofendes, claro que no.

Goten: Marron es tan fuerte como nosotros.

Marron: Corrección, soy más fuerte que ustedes.

Nota: ¿Que Marron es más fuerte que dos sayajins que llegan al primer nivel? Pues sí, es posible. Todo empezó cuando el Dr. Guero transformó en androides a #17 y #18. A éstos les instaló muchos circuitos y micromáquinas, pero eran muy susceptibles a que se estropearan, en especial en los combates. Para que eso no ocurriera, también les instaló un aparato para que tales circuitos se regeneraran continuamente, sólo como precaución. Pero ese aparato no estaba preparado para reaccionar frente a un embarazo, y terminó generando micromáquinas en el cuerpo del bebé que se estaba formando, Marron, por lo que ella también se convirtió en androide. Sólo con una diferencia: Marron puede envejecer, pero sólo hasta los 18 años, edad en que su madre se transformó en androide. Fuera de eso, tiene energía ilimitada, no se le puede sentir el ki, y cualquier otro detalle que haga particulares a los androides. Y cuando Marron tenga hijos, también serán androides, aunque Bulma está trabajando en la forma de arreglar la situación. Otra cosa: esta Marron tiene nariz y los ojos azules, que la hacen más parecida a su madre.

Jaki: Oh, es una lástima.

Marron: Qué creída.

Jaki: No lo soy, es sólo que realmente esperaba que fueran más fuertes, claro que dudo que lleguen a mi nivel, ya que soy casi tan buena como Mr. Satan.

Goten: Ahí está Trunks, es lo más cercano a fuerte que vas a encontrar.

Jaki: ¿Huh?

Marron: ¿De qué hablas?

Goten: Ah, ¿que no te conté, Marron? Bulma le dijo a Trunks que no le permitiría tener citas con cualquier chica: tiene que ser una científica o una buena luchadora.

Marron: ¿Y por qué? No sabía que Bulma tuviese esas mañas.

Goten: Pues dijo que…

Trunks: Mejor cállate, Goten.

Goten: Vamos, es gracioso. Bulma piensa que si alguien se va casar con un sayajin, tiene que saber soportar nuestros «problemas» y ayudar en cuanto pueda.

Trunks: Dijo que no quería una inútil en la familia.

Marron: Totalmente comprensible.

Trunks: ¿La apoyas?

Marron: Absolutamente.

Trunks: Entonces no me queda otra que casarme contigo.

Marron: No, olvídalo, tanto tu mamá como la de Goten siempre se quejan de sus maridos y ellos no hacen más que destrozar la casa y comer, no quiero terminar así.

Trunks: Por favor, Marron, eres mi única opción.

Marron: Ya dije que no.

Trunks: Está bien, me resigno, y pensándolo bien, cocinas muy mal.

Jaki: Además, harían una pareja horrible.

Goten: Ja, ja, no lo puedo creer, está celosa. Otra más para el club de admiradoras de Trunks.

Trunks: Ya déjala, Goten, no la molestes.

Goten: Y tu estás flechado, te gusta.

Trunks se sonroja.

Marron: no sabía que tuvieras tan mal gusto, Trunks… ¡Ay!, se me pasó la hora, me deben estar esperando en casa. Vamos, Bra.

Trunks: Déjala, yo me la llevo después.

Marron: Lo que digas.

Goten: Nos vemos después, yo también me tengo que ir, además, aquí estoy de más, adiós.

La androide y el hijo de Goku se alejan caminando riéndose a costa de la pareja. En el lugar se forma un pequeño silencio, hasta que Bra interrumpe.

Bra: Me quiero ir a casa.

Trunks: Ah, cierto. Bueno, nos veremos en otra ocasión, Jaki.

Jaki: Sí, claro, eh… disculpa, ¿dónde vives?

Trunks: En la capital del Oeste, ¿por qué la pregunta?

Jaki: No, por nada.

Trunks (en tono de broma): ¿Acaso me piensas ir a visitar?

Jakeline se sonroja.

Jaki: No, no es eso, es sólo que pensé que tal vez me podrías ir a dejar. Había quedado de irme con unas amigas, pero a esta hora de seguro que ya se fueron. Pero mi casa está muy lejos de la tuya.

Trunks: ¿Y dónde vives?

Jaki: En la capital de Norte.

Trunks: Guau, eso es bastante lejos, pero no te preocupes, soy un caballero y te llevaré hasta allá, pero tendrás que acompañarme primero a dejar a mi hermana a casa, que si no aparecemos por allá dentro de unas horas, empezará una búsqueda intensiva de nosotros, ¿aceptas?

Jaki: Encantada.

Trunks: Bien.

Después de rebuscar un rato entre su ropa, Trunks encuentra la cápsula que buscaba y la abre. De ella aparece un avión de cuatro plazas.

Jaki: Guau, un jet turbo 9.9, salió a la venta la semana pasada, pensé que yo era la única en tener este jet por lo caro que es. ¿Eres de una familia adinerada?

Trunks: Se podría decir. Tú también lo eres, ¿no?

Jaki: Sí, si no, no podría pagar la cuota que pide Mr. Satan para que me entrene. Seguro que tener a tu padre para que te entrene es mucho más fácil.

Trunks: Yo no diría lo mismo.

Los tres se suben al avión y éste despega rápidamente.

Jaki: Es bastante rápido.

Trunks: ¿No que tú tenías uno de éstos?

Jaki: Je, je, no lo he ocupado, es que no sé manejar.

Trunks: ¿Y para que te lo compraste?

Jaki: Fue un regalo de mi madre, es algo exótica con sus regalos.

Trunks: Ah.

Ambos se quedan un rato en silencio. Luego…

Trunks: ¿Por qué practicas artes marciales?

Jaki: ¿Qué?

Trunks: ¿Que por qué practicas artes marciales? Debes tener algún motivo o algo.

Jaki: En realidad no me lo había planteado. Creo que es para demostrarles a mis hermanos que siempre se puede ser más fuerte. Verás, cuando mis hermanos eran adolescentes, practicaban artes marciales, pero luego de su primera derrota, lo dejaron.

Trunks: ¿Y no buscas la paz en el mundo o algo así?

Jaki: No, porque eso es imposible de lograr. Desde el principio de los tiempos existe la gente corrupta, y va aumentando cada año. Lo que es posible es evitar que siga creciendo, pero no habría un balance en el universo si no existiera la maldad. Si así fuera, no podríamos definir lo que es bueno. Para hacer más corto mi discurso, sin maldad tampoco existe bondad. Claro que si volviera a aparecer un malvado como Cell, o como ese Picoro Dai Maku del que cuentan, yo estaría dispuesta a arriesgar mi vida para salvar al mundo como lo hizo Mr. Satan, o como ese chico desconocido que acabó con Picoro.

Trunks: ¿Crees en esa leyenda?

Jaki: Es cierta, yo misma lo confirmé cuando hable con el rey.

Trunks: Conoces al rey…

Jaki: Trabaja con mi padre. Él me contó que llegó a conocer a aquel chico que acabó con Picoro, pero que luego desapareció misteriosamente y nunca más se supo de él. Creo que me gustaría ser como ese chico, un héroe desconocido… no sé cómo Mr. Satan acepta que la prensa esté metida en su vida todo el tiempo.

Trunks: O sea que te gusta el estilo del Gran sayaman.

Jaki: Tal vez, pero no con esos ridículos trajes.

Trunks: Je, je, claro.

Jaki: ¿Y tú? ¿Por qué practicas artes marciales?

Trunks: ¿Yo? Mmm… lo llevo en la sangre. Mi padre y todos mis antepasados fueron luchadores, es algo que no puedo evitar, y también lo hago, eh… haría para salvar el mundo si tuviera la oportunidad.

Jaki: ¿Cómo es que no te he visto en ningún torneo?

Trunks: Porque no he participado en casi ningún torneo.

Nota: Jaki no pudo participar ni ver el Tenkaichi Budokai 28 porque el día del torneo tuvo que acompañar a su padre a una comida de negocios. Y luego, cuando vio los periódicos y las noticias de cómo había sido el torneo, estos sólo mencionaban al «gran» Mr. Satan y su victoria, olvidando al resto de los participantes.

Jaki: ¿Por qué no?

Trunks: Ya perdió gracia para mis amigos y yo desde que Mr. Satan participa.

Jaki: Ah, te refieres a que no hay posibilidades de ganar.

Trunks: Sí, eso… mira, ya llegamos.

Jaki: ¡¿Vives en la Corporación Cápsula?!

Trunks: Ajá.

Jaki: Entonces eres el nieto del Dr. Briefs.

Trunks: Ajá.

Jaki: Con razón tienes este jet turbo, fue construido por tu madre.

Trunks: ¿Me esperas aquí o entras?

Jaki: Entro.

Trunks, con Bra en los brazos, y Jaki, entran a la gran casa.

Trunks: Ya llegue.

Bulma: Muy gracioso.

Trunks: Je, hola mamá.

Bulma: Muy gracioso, tu primer día en la universidad y no vienes a contarle de inmediato a tu madre cómo te fue, sin contar con el desastre que dejaste esta mañana cuando entraste al laboratorio.

Trunks: Perdón, mamá. Por cierto, volviste a enviar a Bra a Kame House el día erróneo. La traje yo de regreso.

Bulma: No cambies el tema. ¿No me presentas a la joven que te acompaña?

Trunks: Ah, sí. Mamá, ella es Jakeline, una amiga de Videl.

Jaki: Encantada.

Bulma: Hum, Trunks, ¿qué fue lo que te dije sobre que salieras con una chica?

Trunks: ¡No estoy saliendo con ella! Además, ella practica artes marciales con Satan.

Bulma: ¿Satan? Bah, eso no sirve, tú lo sabes.

Jaki: ¿Huh?

Trunks: Mamá, es imposible encontrar chicas más fuertes.

Bulma: Seguirás buscando. No quiero una nuera inútil.

Trunks: Pero mamá, tener la fuerza de Mr. Satan es aceptable, es cosa que yo la entrene y… ¿por qué estoy teniendo esta conversación contigo? Me voy, regreso luego, tengo que ir a dejar a Jakeline a su casa.

Bulma: Espera un momento, Trunks Briefs Vegeta. Tenemos que hablar sobre el desastre de esta mañana. Discúlpanos un momento, Jakeline.

Trunks: Pero…

Bulma arrastra a su hijo hasta la siguiente habitación, dejando a Jaki sola.

Jaki: Qué señora más extraña.

Jakeline recorre la sala, esperando. Se dirige hasta un estante donde encuentra un objeto que llama su atención: una especie de reloj. Lo toma y presiona el único botón que posee, en la parte superior, y en la pantalla aparecen siete luces brillantes indicando siete puntos en el mapa.

Jaki: Qué raro.

Deja el reloj en su lugar y sigue esperando, pero ahora centra su atención en un recorte de diario que estaba enmarcado. Ella lo lee:

 


«EL GRAN TORNEO DE ARTES MARCIALES VUELVE A SORPRENDERNOS»

El Tenkaichi Budokai número 23 se celebró con todo su esplendor, llegando incluso a ser destruida la plataforma.

A pesar de tener menos participantes que el torneo anterior, lograron demostrar su mejor calidad; fue maravilloso. Las eliminatorias se realizaron de forma rápida, demostrando las habilidades de los mejores, los que pasaron a la segunda ronda…


 

Jaki fue interrumpida por los gritos de Bulma.

Bulma: Eres igual que tu padre, ¿cómo eres tan irresponsable?

Trunks: Ya dije lo siento mamá.

Bulma: Eso no me sirve, ahora tendré que hacer todo de nuevo. Deberías ya tener claro que no debes meterte con mis inventos, los destrozaste.

Trunks: Perdón, yo no quería. Apenas los toqué, eran muy delicados.

Bulma: Claro, no tenía por qué hacerlos a prueba de sayajins.

Trunks: Vuelvo a decir lo siento, no volveré a acercarme a nada que se parezca a un refrigerador, ni a una cámara, ni a una batidora tampoco, ¿contenta?

Bulma: Sí, está bien, pasa por esta vez. Tu abuela ya debe haber servido la comida, vamos a cenar.

Trunks: Pero tengo que llevar a Jaki a su casa.

Bulma: Ella se queda a cenar también. No la dejarás con hambre, ¿o sí? No sería caballeroso.

Trunks: Er… está bien.

Y así, madre e hijo salen de la habitación e invitan a Jaki a cenar. Ya en la mesa:

Sra. Briefs: Ya serviré la comida, Bulma querida. ¿Podrías avisarle al guapo Vegeta para que venga?

Bulma: Ni que me hiciera caso… Trunks, anda tú.

Trunks: Bien.

Dr. Briefs: ¿Y quién es esta linda chica?

Bulma: Una amiga de Trunks. Y dime, ¿qué te parece mi hijo?

Jaki: Es… muy amable.

Bulma: Sí, pero, ¿te gusta?

Jaki: ¿Pero qué dice? Si nos acabamos de conocer esta tarde.

Trunks: ¿Qué le estás diciendo, mamá?

Bulma: Nada, nada. ¿Y tu padre?

Trunks: Ya viene.

Justo después que Trunks entrara en el comedor, Vegeta aparece, no dice nada, se sienta y empieza a comer. Trunks y Bra hacen lo mismo y lo devoran todo. Jaki mira asombrada la manera de comer de los sayajins.

Jaki: ¿No… no es peligroso que coman así?

Bulma: No te preocupes, están acostumbrados. Oye, Trunks, ¿alguien ha sabido algo de Goku? ¿Aún esta en el templo sagrado?

Trunks: No se sabe mucho de él. Según Gohan me dijo, Goku pidió estrictamente no ser interrumpido, ya que quiere entrenar a ese chico tranquilamente.

Vegeta pone cara de disgusto, pero no dice nada.

Bulma: Pobre Milk, la comprendo. Teniendo este tipo de hombres en la casa, una entiende.

Vegeta: ¿A qué te refieres con eso, mujer?

Bulma: Me refiero a que eres un irresponsable, ya sería hora que empezaras a buscar empleo.

Vegeta: Ni que importara. Dinero no te hace falta, ¿no?

Bulma: No, pero que estés todo el día destruyendo la casa no me agrada nada.

Trunks: Em, mamá, hay visitas, ¿recuerdas?

Bulma: Ya, lo siento. ¿Cómo es que te llamas?

Jaki: Jakeline. Jakeline Bancraf.

Bulma: ¿Bancraf? ¿Tienes alguna relación con los duques Bancraf?

Jaki: Sí, son mis padres.

Bulma: Guau, entonces eres un muy rica, tanto como nosotros.

Jaki: Pues, sí…

Bulma: ¡Ah!, ahora que me acuerdo, tengo dos buenas noticias: hoy me llamó Yamcha.

Vegeta: ¿Y eso es bueno?

Bulma: Sí, sí es bueno. No sabíamos de él desde hace mucho, y resulta que ya está amarrado.

Vegeta: ¿Huh?

Trunks: ¿Amarrado?

Bulma: Casado, Yamcha se casó, por eso no sabíamos nada de él, no quería que nadie se enterara. Incluso ya tiene un niño, llamado Ryuu.

Trunks: Vaya, nunca me imaginé a Yamcha casado. ¿Y por qué te llamó?

Bulma: Su esposa lo obligó; se llama Esmeralda. Resulta que Yamcha habla mucho de mí y quiere conocerme. Nos veremos mañana, parece una buena chica.

Trunks: Ah, ¿y cuál es la otra noticia?

Bulma: Que Yamcha no es el único que se casó. Cuando hablé con él, me contó que Tenshinhan y Lanch ya llevan 16 años casados.

Trunks: ¿Tenshinhan y Lanch? ¿Los amigos tuyos que nunca conocí? ¿El hombre con un tercer ojo y la chica que cambia de personalidad al estornudar?

Bulma: Los mismos. Están viviendo en las montañas del Este junto con Chaoz y sus dos niños, por suerte ninguno con el problema de su madre. No se comunicaron con nosotros porque no lo encontraron necesario; sólo Yamcha y Chaoz sabían.

Sra. Briefs: Todos se casan últimamente, y ahora el pequeño Trunks trae pareja.

Trunks y Jaki se ponen rojos.

Trunks: No, abuela, no es lo que piensas…

Bulma: Oh, vamos, no se sonrojen, es de lo más normal. Jakeline, déjame decirte que eres la primera.

Jaki: ¿La primera qué?

Bulma: La primera novia que Trunks trae a la casa.

Trunks: ¡Mamá!

Bulma: Ya, ya, no los molestaré más.

Trunks: No me arriesgaré. ¿Terminaste de comer, Jaki?

Jaki: ¿Ah?, sí.

Trunks: Entonces nos vamos.

Jaki: Está bien. Fue un gusto conocerlos, adiós.

Bulma: Adiós.

Trunks y Jaki salen de la casa y se suben al jet turbo sin decir nada, parten y siguen callados. Al rato, el silencio se rompe.

Trunks: Perdón por lo de hace un rato, mi madre es muy imprudente a veces.

Jaki: No te preocupes, no hay problema.

Otro largo silencio. Éste se mantuvo por todo el resto del viaje, hasta que llegaron a la capital del Norte.

Trunks: ¿Es por aquí?

Jaki: ¿Eh? Sí, aquí dobla a la derecha. Sí, para, aquí es.

Trunks aterriza y él y Jaki bajan del avión.

Trunks: Te dejaré hasta la puerta.

Jaki: No es necesario.

Trunks: Claro que sí.

Ambos caminan hasta la puerta y allí Jaki revisa sus bolsillos.

Jaki: Qué tonta, se me olvidaron las llaves.

Decide tocar el timbre y un hombre moreno de alrededor de 30 años abrió.

Jaki: Hola, Ikose.

Ikose: ¿Quién es ése?

Jaki: Ah, él es Trunks. Trunks, él es mi hermano Ikose.

Trunks: Hola.

Ikose: Yo te conozco, pero no recuerdo de dónde.

Trunks: ¿Huh?.

Ikose: ¡Idasa, ven aquí!

Aparece otro hombre de la misma edad que Ikose, pero rubio.

Idasa: ¿Qué quieres?

Ikose: ¿Reconoces la cara de este chico? A mí me resulta terriblemente familiar.

Idasa mira a Trunks con terror.

Idasa: No…no puede ser. Claro que lo reconozco, ¿qué hace él aquí?

Jaki: ¿Lo conoces?

Idasa: Nunca olvidaré su cara, ¡es aquel niño que casi me mata en el Tenkaichi Budokai de hace once años!, ¡¡¡AAAH!!!

Idasa sale corriendo como alma que lleva el diablo, muy rápido y muy asustado, y su hermano Ikose lo siguió de cerca.

Jaki: Por eso me parecías familiar, tú y tu amigo fueron los que vencieron a mis hermanos en el torneo infantil hace once años, ¿no?

Trunks: Ah, sí, se me había olvidado.

Jaki: Hicieron un gran espectáculo esa vez, según a mí me dijeron. Lamentablemente, yo no pude ver la final porque con mi familia nos retiramos apenas mi madre despertó del golpe que le dio una señora que estaba cerca de nosotras.

Trunks: Ah, je, je «la del golpe ése fue Milk»

Se produjo un pequeño silencio.

Trunks: Bien, me voy, es bastante tarde.

Jaki: Sí, creo que sí.

Trunks: Fue un gusto conocerte.

Jaki: Igualmente.

Trunks camina hacia la nave, pero a medio camino se gira.

Trunks: Er…, estaba pensando que…, tal vez podríamos salir a ver una película o algo así un día de éstos, ¿te parece?

Jaki: Claro, cuando quieras.

Trunks: Bien, nos veremos pronto entonces, adiós.

Jaki: Adiós.

Jakeline entra a la casa, se apoya en la puerta y luego suspira.

Afuera, Trunks guarda el jet, se va volando, y suspira.