por Jacinto Muñoz (JM18V)
Basada en el fanfic «Los Guerreros del Mañana«, del mismo autor
Era un día soleado, y #18 se encontraba en la cocina preparando el desayuno.
#18: Mejor me apuro para terminar antes de que Jan se levante.
Cuando #18 está poniendo la mesa…
Jan: Mami, mami.
#18: ¿Qué quieres, hijito?
La Androide abraza a su hijo y lo carga.
#18: Estás muy consentido. ¿Lo sabías?
Jan: Sí. Je, je, je.
#18: Vamos a buscar a tu padre para comer.
Los dos suben al cuarto.
#18: Krilin, despierta, ya es tarde.
Krilin: ¿Sí? ¿Qué hora es?
#18: Son las 9 de la mañana.
Krilin: ¡¡¡Qué!!!
#18: ¿Lo ves? Tienes que ir a trabajar.
Jan: Papá, papá.
Jan salta encima de Krilin y los dos se ponen a jugar en la cama.
Jan: Soy un malvado pirata y te venceré.
Krilin: Vamos a ver si puede, señor pirata.
#18: Cuidado con el niño, Krilin.
Krilin: Cálmate, no lo sobreprotejas.
#18 los miró con gran orgullo, pues se sentía feliz de tener una familia tan maravillosa.
#18: Oye, Krilin, recuerda que en la tarde, mi hermano y yo llevaremos a los niños al parque.
Krilin: No lo he olvidado, recuerda que Marrón llega hoy en la noche.
#18: ¿Cómo olvidarlo? La muy inconsciente tiene tres meses sin venir; ya me tenía preocupada.
Krilin: A mí también, Blood no es muy seguro actualmente.
#18: No te preocupes, volveremos para cenar. Recuerda avisarle a Pan.
Krilin: Bien.
En casa de Milk…
Pan: Vamos, holgazán, arriba.
#17: ¿Qué sucede?
Pan: ¿Vas a desayunar?
#17: Bien.
Los dos bajan las escaleras, y al llegar al comedor encuentran a Max, comiendo como todo un saiayin.
#17: ¡¡¡MAX!!!
Max: ¿Sí?
#17: ¿Cuántas veces tengo que decirte que así no se come?
Max: Pero mamá come igual que yo, papá.
#17: ¿Lo ves, Pan?
Pan: Creo que tengo parte de la culpa.
#17: El niño te imita y mira los resultados.
Pan: Aunque esa conducta es parte de nuestro legado como saiayins.
#17: Pero eso se puede corregir; sobre todo a esa edad.
Pan: Bien amor, lo intentaré. ¿Irás con tu hermana hoy al parque?
#17: Sí.
Pan: Se cuidan, ¿OK?
#17: OK.
Cuando llegó la tarde, #17, #18, Max y Jan se encontraban en el parque.
#17: ¿Cómo estás, hermanita?
#18: Bien, 17. ¿Cómo está todo por allá?
#17: Desde que hay Paz en la Tierra no te voy a negar que me he sentido algo aburrido; pero en el trabajo la he pasado bien.
#18: A mí no me da tiempo aburrirme con tanto que hacer en la casa.
#17: ¿Cómo está Krilin?
#18: Bien, a él también le tocó trabajar. ¿Y Pan?
#17: Está bien, cada día la adoro más.
Jan: Oigan, queremos divertirnos.
Max: Yo también.
#17: Vayan a jugar, pero tengan cuidado.
#18: Jueguen donde podamos verlos.
Jan y Max: Sí.
Los niños se alejan un poco para jugar, dejando a los hermanos solos.
#17: ¿Eres feliz con todo esto?
#18: Claro. ¿Por qué la pregunta?
#17: No sé, pero aún me da vueltas en la cabeza lo que nos hizo el doctor Gero.
#18: Por su culpa perdimos nuestras vidas; pero eso ya pasó, ahora con nuestros amigos y nuestras familias conseguimos una nueva vida.
#17: Tienes razón; nuestro pasado de Androides asesinos quedó atrás.
#18: Sí; pero esta vida que ahora llevo no llegó a mí de casualidad; fue gracias a Krilin y a su amor por mí.
#17: Sí, ya me has contado esa historia.
#18: Fue tan lindo, me protegió, confió en mí, gracias a él no tenemos las bombas y lo mejor fue que logró ver que en el fondo no éramos asesinos.
#17: Aún recuerdo cuando se hicieron novios.
#18: Yo también…
#18: Tengo que decirte algo.
#17: Dime.
#18: Me he hecho novia de Krilin.
#17: ¡¡¡QUÉ!!!
#18: Lo que escuchaste.
#17: ¿Por qué, 18?
#18: Pues, me di cuenta que lo amo con todas mis fuerzas y no tenía caso ocultarlo.
#17: ¿Estás segura de lo que has hecho?
#18: Sí.
#17: Bueno, en ese caso espero que les vaya bien.
#18: ¿Recuerdas mi boda?
#17: ¿Cómo olvidarlo?
#17: Cálmate, 18.
#18: Estoy muy asustada.
#17: Lo sé.
#18: ¿Y si no viene? Me volvería loca.
#17: El vendrá. Más le vale, si sabe lo que le conviene.
#18: Espero que tangas razón.
#17: Ahora tranquilízate y vayamos a la Iglesia.
#18: Pero lo mejor fue cuando tuve a mis hijos.
#17: Sí, fue lo más cómico.
#18: ¡¡¡AAAAAAYYYYYYY!!! Se supone que soy una Androide y esto no me debe doler.
Krilin: Cálmate, estás a punto de dar a luz.
#17: Tranquila y recuerda que nosotros sí podemos sentir el dolor.
#18: Sí, si ya me di cuenta.
Luego de un rato…
Dr.: Felicidades, es una niña.
#18: Es preciosa, amor.
Krilin: Sí…
#18: Aunque tú no te quedaste atrás.
#17: Debo decirte algo.
#18: ¿Qué?
#17: Acabo de empezar una relación con Pan.
#18: ¿De verdad?
#17: Sí, creo que la amo.
#18: ¿Lo crees?
#17: Es que todo esto es nuevo para mí.
#17: Es tan hermosa y me ama. ¿Sabes? Siempre doy gracias porque apareciera en mi vida.
#18: Y ¿cómo olvidar la llegada de Max?
#17: Pan está embarazada.
#18: No pierdes el tiempo, ¿eh?
#17: Va a ser varón; y será un gran guerrero.
#17: ¿Y Jan?
#18: Él es mi consentido.
Max: Tío, cómprame un helado…
Krilin: Vamos.
#17: Krilin va a terminar malcriando a Max.
Pan: Déjalo, un helado no le hará daño.
#17: ¿Y encima lo apoyas? De esa forma Max no se convertirá en el super guerrero que debe ser.
Pan: No seas tan estricto con nuestro hijo. Oye, mira quien viene.
Pan se refería a #18, que acababa de llegar visiblemente preocupada y con unos papeles en la mano.
#17: Hola, hermanita. ¿Qué te pasa?
Pan: ¿Ocurre algo malo?
#18: Krilin, debemos hablar.
Pero Krilin estaba muy entretenido jugando béisbol con Max.
Krilin: Después, #18.
#18: Tiene que ser ahora, ya tengo los resultados.
Krilin: Un momento, no me voy a ir sin ganarle un juego a mi sobrino.
#18: ¡Es importante!
Krilin: Cinco minutos.
Y #18 no aguantó más.
#18: ¡Estoy embarazada, idiota!
Todos: ¡¿Qué?!
Max: ¿Estás embarazada e idiota, tía?
#18: No, yo estoy embarazada y tu tío es el idiota.
Max: Ahhhhh.
#17: Muy bien, picarona, lo tenías escondido; ahora tendré dos sobrinos.
Pan: Felicitaciones, #18.
Krilin no podía hablar, porque la noticia lo dejó petrificado, pero un rato después…
Krilin: U…u…un hijo.
Y cayó desmayado.
#18: Krilin, despierta por favor.
De pronto, ellos ven a los niños pelear en juego.
Max: Soy el gran guerreros saiayin y te derrotaré.
Jan: Eso lo veremos.
Jan golpea muy fuerte a Max.
Max: ¡Ahora verás!
Max se transforma en SSJ y golpea más fuerte Jan, y el niño sale corriendo donde su madre y comienza a llorar.
#18: Ya, Jan, cálmate.
#17: Ven aquí, jovencito.
Max se acerca algo temeroso a su padre, pero sin dejar de ser SSJ.
#17: ¿Qué te he dicho sobre lo de SSJ?
Max: Lo siento…
Max vuelve a la normalidad.
#18: Quién diría que después de querer matar a Gokú terminaríamos tú con su nieta y yo con su mejor amigo.
#17: Qué ironía, ¿no?
#18: Sí, pero debemos volver, Marrón está por llegar.
#17: Vamos, tengo deseos de ver a mi sobrina.
Cuando llegan a casa de #18…
Marrón: Mamá.
#18: Hija. ¿Llegaste hace mucho tiempo?
Marrón: Más o menos.
Jan: Hermanita, hermanita.
Max: Prima.
#17: ¿Cómo te ha ido?
Pan: ¿Cómo estuvo el viaje?
Marrón: Bien, ¿cómo están mi hermanito y mi primito?
Jan y Max: Bien.
Krilin: Vamos a cenar. ¿Les parece?
Marrón: Sí, yo cociné.
#18: Vamos.
Todos se sientan a cenar y la pasan muy bien; luego se despiden.
Krilin: ¿Vienes al cuarto conmigo?
#18: Adelántate.
Krilin: Bien.
#18 se quedó sola en la sala y se dedicó a observar su casa, su vida, su familia; ellos eran su felicidad.
#18: Realmente amo mi vida y no la cambiaría por nada del mundo.
Y en casa de Milk, #17 estaba apagando las luces para acostarse.
#17: Pan me ha hecho muy feliz, ella y mi hijo son mi vida; ellos me han dado un nuevo objetivo para vivir y no pienso perderlos nunca.
Y de esta forma terminan las memorias de los Gemelos 17 y 18, quienes cambiaron su vida para bien por amor. Ojalá todos aprendamos esta bella lección.